El teacher de English.

Sentí una mano en la espalda...Cómo estás? me dijo....era él, con sus ojos de aceituna y con la sonrisa cálida como en el primer dia de clases.

Mi profesor de inglés del chileno británico siempre me hizo temblar y no de susto precisamente, sino lo contrario, su aspecto tan varonil me dejaba sin palabras y además con esas ganas de estudiar más por si acaso me preguntaba algo y saber la respuesta.

Él siempre pensó que con mi compañero de estudio eramos más que dos buenos amigos...siempre nos veía llegar juntos e irnos juntos, pero solo era cuestión de coincidencia, hasta que un día me preguntó...Ustedes con Gonzalo son pololos?...Noooo!!! le respondí, somos amigos, pero nada más...y la sonrisa con esos hoyuelos en las mejillas apareció nuevamente.

Pasaron tantas cosas...tantas palabras que se me hacian tan cortas esas 2 horas de clases...siempre hacía algo para llamar mi atención, hasta a veces me corregía más de lo necesario para pronunciar mejor.

"Victoria...con esa mirada me quemas"...me dijo eso y el silencio en la sala de clases fue más de lo habitual, sentí todas las miradas de mis compañeros sobre mi y sobre él y tratando de justificar lo dicho dijo: "Te enojas tanto con esos ejercicios que parece que quisieras matarme por dártelos" y me dió una sensación de risa...que ganas de reír a carcajadas, por que jamás me enojaría con él...

Que terrible son las miradas, había demasiada conexión entre ambos y no hacían falta las palabras, esas que tanto me gustan ya no importaban, por que nos decíamos más que cualquier fonema...era una química perfecta.

No lo veía desde el cóctel de término de clases, cuando me dió un abrazo deseándome feliz navidad y ese beso en la mejilla que me ardió durante todo mi regreso a casa...y ahora volverlo a ver, igual que siempre, con el mismo aroma, con la misma expresión....Para dónde vas?...al metro....entonces vamos, tenemos tanto por conversar.

*foto perteneciente a don Marcos Contreras.*